Ella y yo hemos decidido tener relaciones íntimas fuera de nuestra zona de confort sin considerar esto como una infidelidad.
Esta relación tan especial puede ser vista como el estado intermedio entre la relación tradicional entre el corredor y el ciclista y el entreno libre. Sin embargo, la idiosincrasia de mi relación con la bicicleta está definida por circunstancias puntuales. No existe un conjunto de reglas o límites para nuestra relación. En cada momento decidimos si puede funcionar o no. Así también, las reglas están sujetas a cambios con el tiempo, en la medida que la motivación o la necesidad evolucionan.
Muchos expertos creen que esta clase de relaciones se abocan a la idea de que la clave de la relación, especialmente en fases cíclicas es la capacidad de decisión y la comunicación abierta entre nosotros dos. Somos fieles a nuestra manera...
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